martes, 20 de noviembre de 2007

ENTONCES apareció el zorro:
-¡Buenos días! -dijo el zorro.
-¡Buenos días! -respondió cortésmente el principito que se volvió pero no vío nada.
-Estoy aquí, bajo el manzano -díjo la voz.

-¿Quién eres tú? -preguntó el principito-. ¡Qué bonito eres!
-Soy un zorro -dijo el zorro.
-Ven a jugar conmigo -le propuso el principito-, ¡estoy tan triste!
-No puedo jugar contigo -dijo el zorro-, no estoy domesticado.
-¡Ah, perdón! -dijo el principito.
Pero después de una breve reflexión, añadió:
-¿Qué significa "domesticar"?
-Tú no eres de aquí -dijo el zorro- ¿qué buscas?
-Busco a los hombres -le respondió el principito-. ¿Qué significa "domesticar"?
-Los hombres -dijo el zorro- tienen escopetas y cazan. ¡Es muy molesto! Pero también crían gallinas. Es lo único que les interesa. ¿Tú buscas gallinas?
-No -díjo el principito-. Busco amigos. ¿Qué significa "domesticar"? -volvió a preguntar el principito.
-Es una cosa ya olvidada -dijo el zorro-, significa "crear lazos... "
-¿Crear lazos?
-Efectivamente, verás -dijo el zorro-. Tú no eres para mí todavía más que un muchachito igual a otros cien mil muchachitos. Y no te necesito. Tampoco tú tienes necesidad de mí. No soy para ti más que un zorro entre otros cien mil zorros semejantes. Pero si me domesticas, entonces tendremos necesidad el uno del otro. Tú serás para mí único en el mundo, yo seré para ti único en el mundo...
-Comienzo a comprender -dijo el principito-. Hay una flor... creo que ella me ha domesticado...
-Es posible -concedió el zorro-, en la Tierra se ven todo tipo de cosas.
-¡Oh, no es en la Tierra! -exclamó el principito.
El zorro pareció intrigado:
-¿En otro planeta?
-Sí.
-¿Hay cazadores en ese planeta?
-No.
-¡Qué interesante! ¿Y gallinas?
-No.
-Nada es perfecto -suspiró el zorro.
Y después volviendo a su idea:
-Mi vida es muy monótona. Cazo gallinas y los hombres me cazan a mí. Todas las gallinas se parecen y todos los hombres son iguales; por consiguiente me aburro un poco. Si tú me domesticas, mi vida estará llena de sól. Conoceré el rumor de unos pasos diferentes a todos los demás. Los otros pasos me hacen esconder bajo la tierra; los tuyos me llamarán fuera de la madriguera como una música. Y además, ¡mira! ¿Ves allá abajo los campos de trigo? Yo no como pan y por lo tanto el trigo es para mí algo inútil. Los campos de trigo no me recuerdan nada y eso me pone triste. ¡Pero tú tienes los cabellos dorados y será algo maravilloso cuando me domestiques! El trigo, que es dorado también, será un recuerdo de ti. Y amaré el ruido del viento en el trigo.
El zorro se calló y miró un buen rato al principito:
-Por favor... domestícame -le dijo.
-Bien quisiera -le respondió el principito pero no tengo mucho tiempo. He de buscar amigos y conocer muchas cosas.
-Sólo se conocen bien las cosas que se domestican -dijo el zorro-. Los hombres ya no fienen tiempo de conocer nada. Lo compran todo hecho en las tiendas. Y como no hay tiendas donde vendan amigos, Ios hombres no tienen ya amigos. ¡Si quieres un amigo, domestícame!
-¿Qué debo hacer? -preguntó el príncipito.
-Debes tener mucha paciencia -respondió el zorro-. Te sentarás al principio ún poco lejos de mí, así, en el suelo; yo te miraré con el rabillo del ojo y tú no me dirás nada. El lenguaje es fuente de malos entendidos. Pero cada día podrás sentarte un poco más cerca...

El principito volvió al día siguiente.
-Hubiera sido mejor -dijo el zorro- que vinieras a la misma hora. Si vienes, por ejempló, a las cuatro de la tarde; desde las tres yo empezaría a ser dichoso. Cuanto más avance la hora, más feliz me sentiré. A las cuatro me sentiré agitado e inquieto, descubriré así lo que vale la feliçidad. Pero si tú vienes a cualquier hora, nunça sabré cuándo preparar mi corazón... Los ritos son necesarios.
-¿Qué es un rito? -inquirió el principito.
-Es también algo demasiado olvidado -dijo el zorro-. Es lo que hace que un día no se parezca a otro día y que una hora sea diferente a otra. Entre los cazadores, por ejemplo, hay un rito. Los jueves bailan con las muchachas del pueblo. Los jueves entonces son días maravillosos en los que puedo ir de paseo hasta la viña. Si los cazadores no bailaran en día fijo, todos los días se parecerían y yo no tendría vacaciones.
De esta manera el principito domesticó al zorro. Y cuando se fue acercando eI día de la partida:
-¡Ah! -dijo el zorro-, lloraré.
-Tuya es la culpa -le dijo el principito-, yo no quería hacerte daño, pero tú has querido que te domestique...
-Ciertamente -dijo el zorro.
- Y vas a llorar!, -dijo él principito.
-¡Seguro!
-No ganas nada.
-Gano -dijo el zoro- he ganado a causa del color del trigo.
Y luego añadió:
-Vete a ver las rosas; comprenderás que la tuya es única en el mundo. Volverás a decirme adiós y yo te regalaré un secreto.
El principito se fue a ver las rosas a las que dijo:
-No son nada, ni en nada se parecen a mi rosa. Nadie las ha domesticado ni ustedes han domesticado a nadie. Son como el zorro era antes, que en nada se diferenciaba de otros cien mil zorros. Pero yo le hice mi amigo y ahora es único en el mundo.
Las rosas se sentían molestas oyendo al principito, que continuó diciéndoles:
-Son muy bellas, pero están vacías y nadie daría la vida por ustedes. Cualquiera que las vea podrá creer indudablemente que mí rosa es igual que cualquiera de ustedes. Pero ella se sabe más importante que todas, porque yo la he regado, porque ha sido a ella a la que abrigué con el fanal, porque yo le maté los gusanos (salvo dos o tres que se hicieron mariposas ) y es a ella a la que yo he oído quejarse, alabarse y algunas veces hasta callarse. Porque es mi rosa, en fin.
Y volvió con el zorro.
-Adiós -le dijo.
-Adiós -dijo el zorro-. He aquí mi secreto, que no puede ser más simple : Sólo con el corazón se puede ver bien. Lo esencial es invisible para los ojos.
-Lo esencial es invisible para los ojos -repitió el principito para acordarse.
-Lo que hace más importante a tu rosa, es el tiempo que tú has perdido con ella.
-Es el tiempo que yo he perdido con ella... -repitió el principito para recordarlo.
-Los hombres han olvidado esta verdad -dijo el zorro-, pero tú no debes olvidarla. Eres responsable para siempre de lo que has domesticado. Tú eres responsable de tu rosa...
-Yo soy responsable de mi rosa... -repitió el principito a fin de recordarlo

lunes, 16 de julio de 2007

Viernes 13

Ese día, mi corazón se desprendió de mi pecho, dizque para buscarme otro corazón que latiera y bombeara al ritmo, que merecía.
Por qué, me abandonas?
Por qué buscarme otro corazón? Si respiro gracias a ti.
No necesito un transplante.
Los donantes son escasos y en Chile la lista, de aquellos que buscan corazón, es enorme. Moriré en la espera. Además es posible que mi cuerpo rechace el ritmo de otro latir. Lo sé, ya que ninguno, ha hecho fluir, mi sangre como tú lo haces.
No me abandones ni pienses que es por mi bien. Mi bien está al momento de posar mi mano sobre mi pecho y sentirte.
Ese día, mi corazón se desprendió, vago y le recordaron la condena de su vivir… será posible aguardar a otro? Permaneceré en reserva y congelado antes qué me lleve el pudrir. Se preguntaba.
En una sala de espera nos reencontramos. Yo silenciosa por el vació, dentro de mi pecho. Él embriagado por la anestesia.
Y ahora qué, me dije.
Hablemos
De qué?
De que… soy un tonto por no tratar de ser el mejor bombeador de sangre.
Mm... Creí que no lo dirías. y qué haremos un RCP o un shock, para reanudar el latir?
O todavía piensas en el transplante?
Sólo pienso que soy tu donador.
Ah, pero no he llenado la ficha.
Nosotros no necesitamos llenar nada. Porque solo basto mirarte y saber que nos pertenecemos.

lunes, 9 de julio de 2007

¿Qué es poesía...?

Por los tenebrosos rincones de mi cerebro acurrucados y desnudos, duermen los extravagantes hijos de mi fantasía, esperando en silencio que el arte los vista de la palabra para poderse presentar decentes en la escena del mundo.

Solo a algunos les es dado el guardar, como un tesoro la memoria viva de lo que han sentido.
Yo creo que éstos son los poetas. Es más creo que únicamente por eso lo son.


Los verdaderos poemas son incendios. La poesía se propaga por todas las partes iluminando sus consumaciones con estremecimientos de placer y de agonía.

Un poema es una cosa que será.
Un poema de una cosa que nunca es, pero que debiera ser.
Un poema es una cosa que nunca ha sido, que nunca podrá ser.


¿Qué es poesía?, dices mientras
Clavas en mi pupila tu pupila azul;
Qué es poesía ¿Y tú me lo preguntas?
Poesía… eres tú.
... Becquer y Huidrobro

jueves, 14 de junio de 2007

#
Bebo la falsedad de mi voz
Haciendo desangrar el latir.
Mi voz crea y las raíces
Se desprenden.
Caigo en las palabras muertas.
Caigo en la fría llama del ser
Dibujando lágrimas en el viento.
Caigo y mis palabras
Caen conmigo,
Defraudando
Al caer.


#
Comiendo la basura del olvido
Rasguñando el orgullo
Sintiendo las miradas ajenas
Soportando el hambre y
Aturdiendo el pensar.
Ciegos en la luz
Ajenos a la verdad.


#
¿Cómo expresar lo que siento?
Mediante las lágrimas
Trazadas por mis labios de tiza
Las cuales manchan las hojas,
Que algún día secarán.
¿Cómo expresar lo que siento?
Palabras del frío sudor.
Noches bajo la pálida luna
De los recuerdos.
¿Cómo sanar?
¿Cómo decir?
¿Cómo…?


#
Madre infértil
¿Qué es para tí una flor…?
Algo que florece por si sola
Algo que no siente,
Una cosa insignificante que molesta y
Se corta de raíz, matándola.
¡Por favor dímelo…! Madre infértil
Acaso
¿Nunca sentiste el calor de tu vientre?
¿Nunca percibiste su corazón latir
Dentro de tí?
¡Por favor dímelo…! Madre infértil
Acaso
¿Nunca en tus ojos apareció el sentir?
¿Nunca viste el sentimiento vestirse
De rojo para los dos?
¡Por favor dímelo…! madre infértil
Entonces si nunca sentiste la flor crecer
¿Tampoco sientes tu corazón latir…?
Madre infértil.


#
Pálida noche de soledad
¿Puedes ver mi alma y desvestir
El sentimiento para mí?
¿Puedes pintar la luna de rojo y
Sacar las estrellas que te rodean?
Pálida noche de soledad
Elixir de vida
¿Puedes embriagar el corazón
Con el vino de tus lágrimas?
Pálida noche de soledad
¿Puedes acariciar sin disfrazar la palabra?
¿Puedes mirar sin el vidrio en tus ojos?
OH, pálida noche de soledad
¿Podrás algún día hacerlo por mí?
¿O tendré que yo, amar y sentir por tí…?


#
Efímera felicidad
Tiempo dorado resumido
En adolescentes suspiros.
Hablamos tanto, pero dijimos tan poco.
Cada cual tomo su camino
Dejando atrás lo que creíamos infinito.
El agua se vertió
Dejando en claro que
Nuestras miradas y sonrisas
Nunca volverán a ser las mismas.
Y aquella luna…
Sí, aquella luna que dimos
Vida con la tinta de nuestros corazones,
Aquella fue muriendo
Por la pincelada
Agria y mezquina
De nuestras propias manos.


#
Tu voz sin palabra
Son como vidrios en mis ojos
Y siento con mayor fuerza
El correr de nuestra sangre
Que está a su vez
Tan unida y tan distante.
…. Silencio una vez más
Que la embriaguez duerme
Pero el silencio es interrumpido
Por el tímido canto de una lágrima
Tímido canto que oprime mi pecho
Dando a relucir la ira
Que golpea mi pecho
Diciéndome al latir:
“ese el que vez allí
Ese es simplemente
¡Tu sangre!


#
En mi rostro siempre
Una sonrisa… creo que así
Nadie nota mis lágrimas.
Lágrimas que no brotan de mis ojos
Sino del corazón.


#
Sola en mi habitación
Cierro los ojos y como una brisa
Los ojos en sangre tengo,
Los abro y por un instante
Se refleja mi interior
Ojos traicioneros
¿Por qué reflejan mi interior?
No ven que tengo que fingir.

#
Tu gran dama de mil colores
Que entibias el hogar
Con tus fértiles manos
No creas que tu nombre
Es tan sólo por el hecho
De tu fructífero vientre
Más bien es digno
De la bella artista
Que crea al niño y al hombre
Con el pincel hecho
De miel y perfume, de tu ser.


#
Eres como una bella flor
Que en sus delicados pétalos
Guarda las lágrimas del roció
Pétalos que son tu corazón
Tan frágil y bello… como tú
Pensar que alguna vez
Abriste tus pétalos a mí y
Yo, bebí de tu dulce néctar;
Quisiera haber detenido el tiempo
Para hacer eterno el latir…


#
Cuando la angustia es demasiada
Sólo tengo ganas de gritar
Pero sé que no puedo.
Así que mis ojos en silencio
Gritan por mí.


#
¿Cómo saber cuando
El corazón lata de vida y
No por la condena de vivir?
¿Cómo distinguir el cándido sentir
Del éxtasis continuo?
¿Cómo descifrar la alegría
De la dibujada sonrisa?
¿Cómo percibir la candidez
De la lascivia llama?
¿Cómo…?

#
Prisionera de tus manos
Encadenada a tu sombra
Soportando y siguiendo
Lo que tú quieras que siga
Mis manos ansían tocar lo intangible
Pero tú las bajas y las condenas
A tu vergüenza.
No pienses que una palabra vale por tus años
Mas mis años no son los tuyos.


#
Mi lápiz quebrado
Por el silencio
Manchado por el
Sangrante corazón
Oculto bajo las sombras
Envuelto por la tímida voz
Quebrado…
Desangrado…
Inserto en la piel.
Dejando
En los ojos, la pena
En las manos, deseo y
En los labios, sequedad.


#
Palabras, ofensas
Siempre escuchadas y
Dirigidas a la embriaguez
Disfrazada por el tedio.
¿Por qué gasta
La comida de las raíces
En el beber de sus tallos?
¿Por qué despierta en mí
El repudio de sus barbullantes actos?
¿Por qué aun lo hace?
¿Por qué aún duele?
¿Por qué…?


#
La música rebota en mis oídos
Mientras las horas pasan
Muy lentamente por mis ojos
La gente ajena a tus manos
Observan con el poder
De su repugnante dinero.
Mundo frívolo y sin color
Que se apodera de la
Candidez de lo esencial.


#
El sangrante latir me hablo de los hechos
Y mis labios punzantes de dolor
Cortaron y bebieron el lagrimoso corazón
Quizá no pudiste ver en mis ojos la pena
O quizá simplemente la sangre no pudo hacer
Lo que a mí hizo… por tí.


#
Silencio a todas esas voces
Que tiritan a mí alrededor
Voces opacas que no vuelan
Voces que hablan en sangre
Defraudando al labio
¡Calla…! por favor
Y no veas atrás
¡Calla…! Y mi voz no explotara.
Sangre de mi labio
No manches la palabra
Que está sucia de tanto guardar.


#
Las palabras escritas
Son de aquellas no pronunciadas
Son del alma… teñida de sangre
Son palabras mudas
Sacadas del más reciente
Trago amargo.

#
La conciencia manchada
Por la avaricia de tus
Infértiles manos.
Toman con ellas
Al eterno y ausente cómplice
Espectador, que enmudece
Bajo el repudio de
Tus manos.
Robo mundano del esfuerzo.
Esfuerzo que no podrás ni siquiera sospechar.


#
Derrama tus venas
En mis manos
Confía el sudor
De tu respiración
En mis labios.
Acaricia tus suspiros
En mi piel.


#
Infarto del alma
Detalles de tu mirada lejana.
Lejana a tu sombra.
Perdida en el dolor.
Reflejada por tu mirada ajena.

#
El olvido presente
En cada suspiro.
Reflejada en la piel.
En el polvo al polvo.
Las flores se secan y
Se olvidan… ¿nosotros?
Con una lágrima.
La soledad arropada de concreto
Despedida… y arrojada a
Su pudrir.


#
Camino por la senda
De las preguntas.
Bajo la tiniebla
Que nubla mis ojos.
¿Quién responde
A preguntas
Enlodadas
Ensangrentadas
Olvidadas?


#
No ves que
El destello del vivir
Es tan frágil.
No notas la sangre
De la realidad.
Arrojemos los segundos
Al pudrir y no
Tu polvo a la soledad
Del concreto.
¿No lo ves…?
La ira de un segundo
No es nada
A la ira
De los segundos
Bañados de frío.
¿No lo vez?


#
¿Miras más allá de mí?
¿Las palabras valen más que el querer?
Las palabras frágiles e inconstantes
Son más importantes?
¿O es simplemente
El orgullo
Hablando por tu razón?
Probarme me sirvió
Para comprobar que
Mi querer no es
De palabras de razón
Sino lo contrario.
Aunque no sirve de nada
Porque tu querer
Está manchado por
Las palabras y mis
Lágrimas.

#
Quisiera tenerte conmigo
Que me cobijaras en tu sentir.
Poder descifrar tus códigos…
El tiempo lo dirá
Lo sé.
Quisiera que no te
Alejaras, pero tu querer
Lo desea.
Quisiera ser tu apoyo,
Tu consuelo, tu amiga
Más que tu poluolda…
Quisiera poder decir
Tantas cosas, que sólo
Lo digo con mi mirada
En la tuya.
Quisiera poder decir esto.
Quisiera que tú me quisieras.
Pero tengo miedo del querer.


#
Mi querer se viste de
Viernes y domingos.
Todo lo que algún día
Mi tinta anhelo y plasmo,
En las hojas de mi sentir
Hoy las veo fluir
De mis ojos y mis venas.
Como si mi lápiz, hubiese
Presagiado mi querer.
Y mi corazón oculto tras
La pintura de la indiferencia.
Aquel… tú, lo embrujaste,
Embriagaste y llenaste
De amor por tí.
Veo tu sonrisa, tu mirar
Y percibo tu olor, en cada
Nota de mi respirar.
Tú eres mi búsqueda…. Y
Mi despertar.
Te amo y no lo dudes
Ya que mis ojos no saben mentir...


#
Soy egoísta, lo sé
Pero veo más allá de mí.
Veo y me hace preguntarme
Por qué estar
Cual es el fin de esto
Para qué si nosotros mismos lo quemamos
Agonizamos.
Que extraño…
El dinero lo mueve todo
Hasta nuestra razón de ver.
Soy egoísta y eso
También lo pago el dinero.


#
Que extraño es el sentir
Y la razón aun más.
¿Cómo hacer…?


#
La vida me da a beber
Amargo y dulce sentir.
Aprobación, inseguridad,
Rabia, frustración.
Un sin fin de miradas…
Risas contenidas, lágrimas
Derramadas y bebidas
Por las sendas caminadas
¿Qué es estar bien o mal?
¿Qué buscamos…?
¿Por qué lo que creemos
Haber encontrado aun
No es suficiente?
¿el amor es suficiente
Cuando… se sabe que
Una persona ama más
Que la otra?
¿Qué es el amor al final?
¿Felicidad, llanto, uno lo otro
Los dos, ninguno?


#
siento que tu querer es azul
Tranquilo, bonito
Complaciente
Que nació como una lágrima
Tímida, espontánea
Reflejo de un querer…
Así es nuestro amor
Surgió, cándida, recelosa
Antes los ojo,
Tomo vida, fruto de incertidumbre, sensaciones
Inexperta hacia su recorrido
Deslizándose así hacia
Su fin, en donde otra
Lágrima brotara.


#
Después de tanto tiempo
79 lágrimas en tinta
Ya no tenia melodía, no brotaba
Al son de un anhelo,
Se congelo con la brisa
De la primavera.
Qué hacer cómo brotará
Espontánea, esforzada,
Doliente… ¿alegre?
Es extraño hablar escribir
De los hechos con olor.
Es extraño estar y creer
Es extraño no ver el dolor
De mis venas.
Es extraño crecer y que te vean.
Siempre tímida, atrás, indiferente…
Bebo el sudor del querer
Embriagándome...
¡¡¡Ya no hay papel!!!

Quizás estaba tan empecinada a creer y sentir, que me invente un corazón Me invente un universo, una historia. Quizás solo fue un escape, u...