
Por qué, me abandonas?
Por qué buscarme otro corazón? Si respiro gracias a ti.
No necesito un transplante.
Los donantes son escasos y en Chile la lista, de aquellos que buscan corazón, es enorme. Moriré en la espera. Además es posible que mi cuerpo rechace el ritmo de otro latir. Lo sé, ya que ninguno, ha hecho fluir, mi sangre como tú lo haces.
No me abandones ni pienses que es por mi bien. Mi bien está al momento de posar mi mano sobre mi pecho y sentirte.
Ese día, mi corazón se desprendió, vago y le recordaron la condena de su vivir… será posible aguardar a otro? Permaneceré en reserva y congelado antes qué me lleve el pudrir. Se preguntaba.
En una sala de espera nos reencontramos. Yo silenciosa por el vació, dentro de mi pecho. Él embriagado por la anestesia.
Y ahora qué, me dije.
Hablemos
De qué?
De que… soy un tonto por no tratar de ser el mejor bombeador de sangre.
Mm... Creí que no lo dirías. y qué haremos un RCP o un shock, para reanudar el latir?
O todavía piensas en el transplante?
Sólo pienso que soy tu donador.
Ah, pero no he llenado la ficha.
Nosotros no necesitamos llenar nada. Porque solo basto mirarte y saber que nos pertenecemos.